Candidatura nº1 al CT de Madrid

Candidatura nº1 al CT de Madrid
Candidatura nº1 al CT de Madrid encabezada por Manuel Lindo

martes, 19 de julio de 2011

Una propuesta de Consejo Territorial coherente con el modelo de partido

Estimados compañeros,

Nos encontramos en plena campaña para la elección al Consejo Territorial de Madrid y me siento muy orgullosa de poder participar en este proceso formando parte de la candidatura de Manolo Lindo.

Somos, y lo estamos ya experimentando en esta campaña, la candidatura que mejor reúne los requisitos que consideramos imprescindibles para desempeñar las funciones como Consejo Territorial: un equipo cohesionado, con estabilidad, compuesto por personas que suman al proyecto y que trabajan de forma generosa pensando en mejorar nuestro partido, sin protagonismos mal entendidos que dificulten el seguir creciendo. Personas que no abandonan sin motivo el barco en mitad de la singladura. Personas con capacidad de organización y de trabajo, proactivas, empáticas, capaces de prevenir conflictos y de gestionarlos adecuadamente en el caso de que se produzca, como demuestran nuestras trayectorias en el partido.

Todo esto, por supuesto, sin desmerecer a las otras dos candidaturas integradas por personas a las que conozco y admiro y que merecen todo mi respeto.

Estamos en un punto crucial de nuestro camino como partido. Acabamos de aprobar con nota nuestras primeras elecciones autonómicas y municipales y debemos por ello sentirnos orgullosos y satisfechos del trabajo que entre todos hemos realizado. Esto, sin embargo, no significa que hayamos llegado a nuestra meta ni mucho menos, ni que debamos bajar la guardia porque consideremos que está todo conseguido. Nada más lejos de la realidad, se nos presentan nuevos retos que debemos superar y para ello debemos estar todos más unidos que nunca.

Una de estos retos  es consecuencia directa de nuestro éxito en las pasadas elecciones: 152 cargos públicos, 72 de ellos en Madrid. Tenemos que reorganizarnos para dar cabida en nuestra estructura a estos cargos y  que puedan desempeñar su labor como representantes de los ciudadanos de la forma más eficaz posible. Y hay que apoyarlos especialmente ya que en la mayoría de los casos, nunca han desempeñado estas responsabilidades. Todo ello sin descuidar las funciones de organización y expansión pues debemos consolidarnos y seguir creciendo como partido, ocupando lo mejor posible nuestra nueva posición en la escena política.

Para superar estos retos nuestro equipo tiene la convicción de que es necesaria una única dirección de la acción política. Una única dirección que a nivel nacional fije directrices políticas comunes para todos los cargos para conseguir unidad de criterio en toda España. Una única dirección que apoye y oriente a nuestros cargos públicos noveles en su quehacer diario y que los integre y coordine con los órganos territoriales del partido.

Tenemos la convicción de que es necesario que el Consejo de Dirección sea el director político de nuestros grupos institucionales y los Consejos Territoriales y  Locales sean los órganos que lideren la expansión del partido y la organización interna y de medios, asegurando los cimientos necesarios para que los primeros puedan desarrollar su acción política.

Pensamos que no debemos reproducir en cada comunidad un Consejo de Dirección en miniatura que desempeñe funciones políticas y organizativas. Esto, necesariamente nos llevaría a imitar a los partidos grandes que son una federación con 17 direcciones políticas autonómicas que defienden en cada territorio planteamientos muchas veces contradictorias entre sí.

Con esta visión el único órgano del partido que podría compaginar cargos públicos e internos sería el CD puesto que él dirige y ejecuta la acción política mientras que los órganos territoriales han de centrar su trabajo en el funcionamiento interno del partido. Esto no significa que los Consejos Territoriales y los Consejos Locales sean meros títeres al servicio del  Consejo de Dirección, sino que cumplen una función diferente: la organizativa. Por supuesto, para que esta visión funcione es necesaria una comunicación fluida y constante entre todos los órganos del partido y el grupo institucional.

El no concentrar en una sola persona cargos públicos y orgánicos, favorece además la participación de los afiliados en la vida del partido y genera contrapesos de poder que harán más dinámica y fuerte a nuestra organización.

Somos una organización en constante evolución y lo que se considera adecuado para una coyuntura puede que no lo sea para la siguiente o para la anterior. En nuestra opinión, el momento en el que nos encontramos requiere la estructura descrita.

Finalmente, no nos hemos de olvidar que a día de hoy, y a pesar de los buenos resultados obtenidos en las pasadas elecciones, todavía somos una trainera entre dos trasatlánticos. Y lo que somos a día de hoy condiciona la organización que proponemos: siguiendo criterios unificados, ágil, y trabajando al unísono. Cuando seamos un trasatlántico hablaremos.

Almudena Fernández de Soto Ambrona

1 comentario:

  1. Estoy totalmente de acuerdo con vuestro planteamiento. Las personas son importantes, pero a largo plazo es la forma en que se organiza un partido lo que va a condicionar su estilo de hacer política. Las personas pasarán, unas serán mejores y otras peores, pero lo peor que podríamos construir es una organización que favorezca que cada uno vaya a lo suyo o que los objetivos de unas partes sean incompatibles con los objetivos del conjunto. Se trata de que UPyD nunca llegue a ser como el PP y el PSOE.

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